No te creas nada de lo que te dicen.
Si haces eso, te irá bien en todo lo que hagas porque en lo único que debes creer es en tus resultados y en tu capacidad. Y ni unos ni otro son limitados, pequeños o rígidos. Al contrario, son expansivos, adaptables y enormes.
Llegar a esa creencia es un camino. Se llega con el tiempo y construyendo algo que definiré como conciencia, fruto de darte cuenta de lo que te ocurre y de la reflexión sobre lo que quieres.
Es desde este punto desde donde se inicia tu visión board.
Al
inicio, por lo tanto, se trata de que crees un espacio mental en el que tomas
conciencia de cómo es la realidad que vives, de qué es lo importante para tu
vida y de qué futuro te espera o deseas (si no introduces cambios o si lo
haces).
El
enfoque habitual que se le da a un visión board es personal.
El mío,
implicada y comprometida con el desarrollo del trabajo y de los negocios, es un
enfoque profesional y es igual si eres o no dueño de un negocio de 1 o de 100
personas, líder empresarial o directivo.
El inicio de la construcción del vision board para tu profesión es el mismo:
- la toma de conciencia de la realidad de tu negocio/trabajo,
- la concreción de lo que es importante para ti en relación a tu negocio/trabajo y
- la reflexión de cómo quieres que sea en el futuro próximo.
¿Cómo va a ayudarte crear un vision board profesional para tu negocio?
Los seres humanos somos animales, racionales a veces y animales siempre.
Por ello, volvemos a nuestras rutinas más ancestrales creando vidas que no deseamos.
Salir de esos patrones es voluntad tuya, o mía, de nadie más. Y como no es sencillo romperlos tienes que encontrar un para qué «generador» de tu bienestar emocional.
Te voy a dar unos cuantos “para qué’s” emocionalmente positivos sobre la creación de los tableros de visión.
- Va a darte foco y claridad. ¡Anda que no te dispersas!, como todos. Este compendio de lo importante en tu vida va a orientar tus pasos siempre (si le dejas, claro)
- Te ayuda a recordar. La memoria es frágil y ese recordatorio será un chute de motivación, por eso ha de estar en un lugar accesible, como un fondo de escritorio en el ordenador. No es para meterlo en una carpeta y olvidarlo.
- Es visual. Y nada más visual que un ser humano, verdad? Todo nos entra por los ojos, de ahí que los colores, las fotos, la apariencia sea tal que con un vistazo recuerdes el para qué de tu tablero.
- Desarrolla una habilidad poco extendida en los negocios y empresas, la visión global. Seguro que sabes por qué no podemos vernos la nariz: porque la tenemos demasiado cerca. Lo mismo pasa con tu negocio.
- Te hace responsable. Una vez que te haces consciente ya no puedes ser indiferente y si lo eres no deberías disfrutar del privilegio de la queja ya que estás como estás desde tu consciencia.
- Es divertido y motivador. ¿Quién dijo que planificar el próximo año de tu empresa o departamento debía de ser aburrido y triste?
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Un negocio, desde micro hasta enorme, debe de constituir estos dos pilares para seguir en la carrera. Revisarlas hoy más que nunca es vital y ambas han caído en el olvido.
¿Por dónde empezar a trabajar un vision board?
Como he comentado hay dos claves:
- Darse cuenta de la realidad y aceptarla
- Reflexionar sobre lo importante
Por eso entran en juego dos elementos más:
- Los sueños
- Las metas
Ambos ponen en marcha la motivación otra de las claves para construir ese futuro positivo que deseas.
Tus resultados y tus capacidades (que mencionaba al principio) están intrínsecamente relacionados con la motivación ya que sin ella no podrás expandirlos.
Es una de las fuerzas impulsoras de la acción que es quien modela tus comportamientos a todos los niveles. Gracias a ella las probabilidades de alcanzar esos sueños y metas aumenta.
Sin ella pueden darse hasta cuadros depresivos ya que la motivación abarca el sentido de la vida, el propósito para tener una vida que valga la gloria vivir.
Como verás, un vision board no tiene nada de “mágico” ya que no es fruto de una ilusión sino de un trabajo profundo introspectivo, de un tiempo dedicado a explorar tu propio camino de vida profesional.
Tienes ya los dos pilares sobre los que organizar tu tablero de visión.
- Los valores que presiden tu vida profesional, aquellos que alineados con los personales van a darte una profunda sensación de bienestar y satisfacción.
- La motivación, que es la fuerza impulsora de la acción que necesitas para alcanzar ese futuro que incluye tus metas y sueños.
¿Qué es entonces un vision board?
Para mí, es la materialización de todo lo anterior.
Es un proceso creativo, conectado con tu deseo más íntimo, con el que dar forma, color, olor, sonido, lenguaje y tacto a todo lo que has definido.
Para ello puedes recoger fotos, frases, colores, aromas, recuerdos, personas o pensamientos incluso puedes pedirle a alguien que te escriba algo relacionado contigo, con lo que tu ofreces o con lo que los demás perciben de ti.
La reflexión sigue siendo la clave para dar contexto a lo que sientes motivador, al futuro que encarnará tus valores y tus metas.
Yo busco todos esos elementos físicos o digitales, haciéndome estas preguntas sobre cada uno de esos elementos (valores y motivación) que he trabajado con anterioridad.
- ¿A que huele o cómo se oiría? ¿lo puedo asociar a un olor o a una música? Por ejemplo puede evocarme el olor a nuevo, a lluvia, a una música clásica o rock.
- ¿En qué parte de mí lo siento? ¿qué sensación me transmite? Quizás es algo mental o la siento en mi respiración, me transmite calidez, frío, pasión, serenidad, fuerza, optimismo.
- ¿Qué entorno o ambiente me sugiere? Rural, urbano, de campo, con flores, oscuro, claro.
- ¿Con quién lo comparto? ¿quizás estoy solo/a? ¿buscaría a alguien? ¿dónde lo encuentro? Quizás no lo conozco.
- ¿Qué tacto tendría si lo tocara? ¿qué forma? Suave, curvo, tendría aristas, múltiples caras, rugoso, terso, mullido.
- ¿Qué palabras me inspira? ¿Cuál sería su lenguaje? ¿Verbos de acción, adjetivos, sustantivos? ¿Frases completas?
Es un proceso increíble pasar por esta forma de “materializar” todo aquello que te motiva y en lo que vas a trabajar el resto del año. Siente qué encarna para ti todo eso que estaba dentro de ti.
Ahora es el momento de buscar qué elementos representarán todo lo que has pensado, sentido y anotado hasta ahora. He dicho buscar, solo buscar y organizar en una carpeta.
¿Qué hago ahora con toda esta recopilación de material?
¿Ya lo tienes todo? Escoge un soporte físico (un tablero de corcho) o digital. El mío es digital y lo tengo de fondo de escritorio.
Es el momento de establecer prioridades ya que un tablero de visión tiene un cometido:
Ayudarte y facilitarte el camino hacia tus metas.
Así que no se puede colocar todo a lo loco.
Lleva un orden para que el futuro se vaya construyendo desde la parte más próxima y realista al ahora hasta aquellas metas más grandes y más lejanas futuras.
Quizás puedes empezar por el centro, dividirlo por categorías, utilizar el tamaño o el color como elemento diferenciador. Puedes utilizar iconos para unir con líneas o flechas algo relacionado, para destacar alguna frase, stickers que pongan una nota de humor. Incluso algún gif.
Utiliza la creatividad, déjate llevar por lo que sientes que es para ti. Es un momento para dedicarte, para disfrutar. Es un momento para entrar en flow con quién eres.
El motivo de hacer todo esto es la posterior revisión que has de realizar de tu tablero de visión.
El esfuerzo y tiempo utilizados deben de apoyarte y serte útiles en el tiempo. Así que la revisión es importantísima sea cual sea la periodicidad que te pongas.
De ahí la necesidad de priorizar. Las revisiones nos indicarán el rumbo que llevamos, para rectificarlo según el tablero si es lo que en ese momento quieres o para volver al rumbo establecido si te has alejado de él involuntariamente.
Tu vision board es flexible y adaptable como tú y tus circunstancias. Y a la vez es tu pepito grillo. En este proceso deberás llevarte bien con él y llegar a consensos para seguir alineado/a con tu motivación y tus valores y metas.
Conclusiones
Crear un vision board para tu empresa, tu negocio, tu trabajo va a facilitarte construir el camino a recorrer este 2024.
Siéntete libre de hacerlo para el ámbito personal si así lo deseas utilizando la misma metodología.
Lo puedes hacer desde la reflexión y la consistencia a valores y con una motivación clara y sostenible o no hacerlo.
La decisión es tuya.
Siempre pienso que cuando no lo intentas no tienes derecho a la queja. Y si lo intentas, la queja no vendrá a ti ya que estarás muy ocupado/a actuando en un sentido o en otro.
¿Crear un vision board es una garantía de que todo va a salir según tus deseos?
Si te estás preguntando eso, a lo que no voy a responder, te voy a preguntar yo,
¿No hacerlo es garantía de que sí va a salir lo que deseas?
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