Hablamos de las 7 claves para navegar en tiempos de crisis, lo que se llaman los «cisnes negros». Y es importante saber cómo trabajarlas porque afecta al crecimiento de tu empresa y su efectividad.
Cuando hay problemas deseas tener una red de seguridad para no caer. Primero la pandemia, luego la cadena de suministros y ahora la inflación nos están rasgando esa red. Los referentes pasados no sirven para visualizar el corto plazo y aun menos el medio, por la enorme velocidad a la que todo cambia.
El largo plazo de antes es el nuevo medio plazo de ahora. Ya no nos podemos mover en el corto plazo. La preparación ante los imprevistos es el nuevo corto plazo.
Son diferentes realidades por las que otros ya transitan, quizás desde hace tiempo, pero que tú no has integrado aún. Las crisis son oportunidades para gestionar y superarlas.
Cómo manejar y optimizar las crisis en tu organización.
¿En qué ha quedado aquella «nueva normalidad»? ¿Crees que el mercado y tus competidores han vuelto al 2019?
Además de la pandemia te está pasando por encima la tecnología. Lo que en 2020 se inició con un «zoom» ahora te está impidiendo competir en los mercados. Lo que no estás haciendo tú lo están haciendo los demás.
¿Y las nuevas generaciones? Las relaciones profesionales, ¿acaso no han cambiado?
Manejar todas estas variables y optimizarlas para que dejen de ser una amenaza y pasen a ser parte de tu ventaja competitiva es el verdadero liderazgo
Cuánto mejor sea la base, más resistente será la construcción de la organización. Liderar se ha convertido en un desafio que pocos quieren afrontar.
Estas son las 7 claves para navegar en tiempos de crisis. Tiempos y crisis variables en sí mismos. Navegar nunca fue tan complejo y nunca se necesitaron tantas habilidades y capacidades.
1.- Conocimiento del mercado
Es el conocimiento para construir relaciones colaborativas. No es para competir, sino para crear algo diferente. Muchas empresas lo han hecho antes. ¿A qué esperas? Hay que sacar la cabeza fuera del cubículo y abrirte a conocer el mundo que te rodea desde otra perspectiva. Antes de hacer nada mira cómo están y qué hacen los demás, clientes, competencia, aliados, proveedores.
Toma ideas prestadas y transfórmalas en algo propio para ganar en eficiencia.
2.- Estudio de riesgos
El mayor de los riesgos es ignorarlos. Enfrentar las consecuencias empieza por dejar de trabajar para evitar perder. Asume que la consecuencia de la inactividad, de la indecisión es la desaparición. ¿Te lanzarías de un avión sin paracaídas? Por favor, con los riesgos trabajas pensando, aprendiendo, preguntando, y sí, tomando decisiones para poder seguir navegando.
3.- Redistribución de las personas
¡Qué grande es tener un equipo! ¡Qué grande es tener la cultura que se necesita para avanzar juntos! ¿No la tienes? Pues llegas en un momento ideal para iniciarla.
Se pueden redistribuir funciones y tareas, podemos reestructurar departamentos. ¿Por qué no pueden ser “móviles”? Las personas son tu activo más importante, pregunta, dales voz, delega en ellas, reforma, repiensa, reimagina. Un mundo nuevo abre un sinfín de posibilidades. Ellas son quienes realmente aumentarán la efectividad de tu negocio.
4.- Gestiona el momento
Hay muchos profesionales que pueden ampliar las habilidades y competencias de tu equipo. Hoy en día las colaboraciones de profesionales independientes son valiosas e importantes palancas. Eso sí, el momento es ahora.
5.- Comunicación
6.- Alianzas
7.- ONLine-OFFLine
La fuerza no consiste en ganar. La fuerza consiste en elegir las batallas y decidir no rendirte